Agility mas que un deporte divertido...
Todo inició durante el segundo semestre de 1977 cuando John Varley buscó a Peter Meanwell de Lincoln, Gran Bretaña. John era miembro del comité Cruft Dog Show, la responsabilidad de John era los tiempos muertos que existían entre las competencias de obediencia y el comienzo de los juzgamientos de las razas. La idea de John era una competencia de saltos debido a su conexión con pruebas hípicas, pero necesitaba de alguien que entrenara perros para encontrar las respuestas que buscaba.
Pidió a Peter que desenvolviera una prueba y equipos apropiados, elaborando un plan de principios básicos. El factor principal que siempre tuvo en mente era un evento muy alegre, sin peligro para los perros y que tuviera una gran respuesta del público. Peter se dió cuenta que para agregar interés necesitaba envolver a otro club y entró en contacto con Trevor Jones del Yorkshire Working Trials Training Society, para que entrenara un grupo de 4 perros.
Los dos equipos de cuatro perros llegaron al CRUFT DOG SHOW
en 1978. Compitieron entre sí con un gran suceso. Al año siguiente, después de las eliminatorias, comparecieron tres equipos.
Durante 1979, el Kennel Club introduce reglas para las pruebas de agility y así el agility recibe la aceptación oficial, cuando las reglas fueron establecidas, fueron muy bien recibidas. Sin las reglas ningún competidor o juez tenía el recurso para argumentar algún problema o disputa que aconteciera.
El Kennel Club aplicó algunas reglas básicas con los obstáculos y con la forma de puntuación. Siendo los obstáculos lo más importante. Las reglas del Kennel Club tomaban en consideración la seguridad del perro.
La primera prueba de agility organizada con las nuevas reglas del Kennel Club, fué el evento de Cruft en 1980, después de las pruebas de eliminación, tres equipos clasificaron para este evento. Juzgando Peter Meanwell que fué uno de los responsables del desarrollo de este deporte, tuvo una dura tarea de interpretar las reglas, sin duda fue un buen acierto, quien mejor para juzgar la primera prueba de agility, que su creador.
En los pocos momentos que estuvieron en la arena principal del Cruft, quedó claro que este deporte era el vencedor entre los espectadores, la reacción fue tan generosa que fué obvio que el Kennel Club tenía por primera vez un deporte genuino.
La penalización de cada perro era más simple que en cualquier otra competencia de perros, el hecho de que los perros compitieran contra el reloj, introdujo un elemento de velocidad y con todos los ingredientes juntos, el resultado fue un evento de acción que agradó al público.
En su forma original el agility consistía de un evento estándar, con un circuito diseñado en figura ocho, con una mesa en el centro, en la cual el perro tenia que hacer una pausa de 5 segundos, este sistema permitía a los competidores correr dos veces el mismo circuito. Contando siempre la mejor vuelta o las dos juntas, el hecho de que cada perro pudiera corre dos veces, generalmente originaba problemas, particularmente cuando sólo una de las vueltas era contada. Conductores experientes podían utilizar la primera vuelta como entrenamiento haciendo el recorrido despacio, para indicarle al perro la ruta correcta y después ir mas rápido contra el tiempo.
Quedó claro que el mejor sistema, era solamente el de un intento, en la cual se demostraba la habilidad de controlar al perro. El problema era que este sistema significaba que un conductor que talvez hubiera viajado por varios kilómetros para estar presente en la competencia, únicamente se presentaría por algunos segundos, lo cual no valdría la pena. El progreso lógico fue la creación de dos modalidades (Agility y Saltos), que permitiría a cada perro participar de dos tipos de evento.
El primer año que el Kennel Club reconoció este deporte, fué obvio que los premios serían divididos entre la minoría de los mejores perros y que los otros competidores tenían poca o casi ninguna oportunidad de vencer. Pensaron que la mejor solución era desarrollar uno o dos grados, de los cuales el mejor perro avanzaba al siguiente grado. Las experiencias en esa dirección probaron ser un suceso durante 1980 y en 1981, donde apareció por primera vez del grado II en la cual se requería un alto nivel de conducción.
Agility es una gran diversión para conductores y perros y está creciendo en el mundo entero, es sin duda una de las mejores cosas que aparecieron en el mundo canófilo.
Fuente de la información:
Agility Dog International - Peter Lewis